Nuestra Señora del Rosario de Fátima

 

 

Al medio día del 13 de Mayo de 1917, en la pequeña Cova de Iria, en Portugal; tres inocentes niños pastores fueron merecedores de la gracia de ver a la Santísima Virgen María. Estos niños estaban alejados del mundo exterior, se encontraban en plena guerra y no sabían que sucedía en los otros países. Hoy en día la Santísima Virgen de Fátima es una de las advocaciones marianas más conocidas en todo el mundo. El rezo del Santo Rosario aumentó gracias a la aparición de la Reina de los cielos en Fátima. Y es que fue ella misma quien dijó a los Beatos Francisco y Jacinta y a la Venerable Sierva de Dios Sor Lucía: "Rezad el Santo Rosario diariamente, para lograr la paz del mundo". Este mensaje maternal hace eco aún en los corazones piadosos que desean agradar en todo a la Madre de Dios. Nuestra Madre Bendita reveló tres secretos en Fátima, y profetizó terribles cosas para la humanidad, para la Iglesia y para el Papado. Expresó la Soberana Señora su santo deseo de que todos los paises del mundo fueran consagrados a su Inmaculado Corazón, especialmente Rusia, porque si no esparciría sus errores por todo el mundo. Pero cabe recordar que esa consagración aún no se ha hecho en totalidad. Pues las veces que los Sumos Pontifices han consagrado al mundo a la Virgen, no han estado presentes todos los obispos del mundo en la Plaza de San Pedro; además Rusia esparció sus errores por el mundo (el comunismo). Cumplamos con lo que nos pide la Santísima Virgen de las Virgenes, recemos diariamente el Santo Rosario, hoy si es posible recemos la corona completa (gozosos, dolorosos y gloriosos), y roguemos a Dios Nuestro Señor para que el mundo sea consagrado al Inmaculado Corazón de María, y se cumpla la promesa esperanzadora de la Reina de los Angeles:

 

 

"AL FINAL MI INMACULADO CORAZÓN TRIUNFARÁ"

¿Me preguntas que sí quiero a María?

Santa Laura de Jesús

 

Bendito sea el Señor, demos gracias al Señor. Sea lleno de dicha y gozo el corazón de todos los colombianos, porque se ha dignado Dios Todopoderoso en conceder a la República de Colombia a una hija tan insigne como lo ha sido Santa Laura de Jesús. Que se alegre la patria del Sagrado Corazón de Jesús, que cante jubilosa la tierra de la Virgen de Chiquiquirá, porque el vicario de Cristo ha elevado a la gloria de los altares a la madre de los indigenas, a la misionera evangelizadora de Colombia. María Laura de Jesús Montoya y Upeguí hoy es conocida en todo el orbe como Santa Laura de Jesús, la primera santa nacida en tierras colombianas. Como ya lo ha dicho el Arzobispo de Bogotá y primado de Colombia, Monseñor Ruben Darío Cardenal Salazar Gómez, la tierra colombiana ha sido el lugar de santificación de muchos, como San Pedro Claver, San Ezequiel Moreno, el Beato Luís Variara, el Beato Mariano de Jesús, entre otros; pero nunca en la historia de la Iglesia se había elevado a la gloria de los altares a alguno nacido en Colombia. Es un motivo de mucha alegría, porque el Señor concede de manera especial una bendición muy grande a Nuestro País. Santa Laura fue una mujer valiente y piadosa, que defendió a los indigenas, evangelizó en las selvas y junglas, e hizo amar y adorar el Santísimo Nombre de Jesús en toda Colombia. La Madre Laura fundó la comunidad de las Hijas Misioneras de la Inmaculada Concepción y de Santa Catalina de Siena, fue maestra e incansable catequista de las comunidades indigenas. Santa Laura nació en Jérico / Antioquia y murió en Medellín. Desde su nacimiento hasta su muerte estuvo totalmente consagrada al Señor. Fue bautizada en una rudimentaria pila bautismal a tan sólo pocas horas de su nacimiento. Condecorada por el Presidente de la República con la Cruz de Boyacá, el honor más grande que puede recibir un colombiano. Fue Beatificada por Juan Pablo II, y mañana será inscrita en el catalogo de los Santos por el Papa Francisco. Pidamos a Santa Laura, la madre laurita como cariñosamente es llamada en su patria; que interceda a Dios por nosotros para que cese la guerra en Colombia y seamos llenos de un espiritu de evangelización y caridad:

 

"Oh Padre Eterno que creasteis a Santa Laura de Jesús, Oh Hijo de Dios que la habeis redimido con vuestra Sangre Preciosa, Oh Espíritu Santo que la enriquecisteis con vuestros preciosos dones, Oh Augusta Trinidad humildemente postrados ante vuestra Divina presencia, os suplicamos por intercesión de Santa Laura, nos concedaís el remedio en nuestras necesidades. Así mismo os suplicamos la gracia de vivir toda nuestra vida a la luz del Evangelio, siguiendo el ejemplo de Santa Laura. De tal manera que con nuestro testimonio de amor hacía vos, y de generosidad para con nuestros hermanos, atraigamos a muchos a una viva experiencia de amor a Dios. Os lo pedimos por Jesucristo, vuestro Hijo, que vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, por todos los siglos de los siglos, Amén"

 

"V: Ruega por nosotros Santa Laura de Jesús

R: Para que seamos dignos de alcanzar y gozar las promesas y gracias de Nuestro Señor Jesucristo, Amén."

San Pio V

 



En el antiguo y válido calendario tradicional, previo a las reformas modernistas de ese "Concilio Vaticano II"; hoy la Iglesia conmemora al Gran Pontífice San Pio V. Por ser hoy domingo no se menciona su nombre en la Santa Misa. Este Papa fue realmente piadoso, escribió el actual Misal para el Rito Tradicional condenando a cualquiera que se atreviese a cambiar tan sólo una tílde de la Santa Misa, alcanzó con el rezo del Santo Rosario el triunfo de los cristianos en la Batalla de Lepanto, fue Fraile Dominico y fiel servidor de la Iglesia, defendiendola de todo modernismo. El Gran Valor espiritual que nos ha dejado el Gran Pio V, hoy en día es desperdiciado, no se toma en cuenta. Se ignora el mandato de este Sumo Pontífice en su Bula "Qui Primum Tempore", en la cual deja constancia de que si alguno se atreve a cambiar la Santa Misa tal y como él la había ratificado, explicado y perpetuado, tendría que rendirle cuentas a Dios Todopoderoso y a sus Santos Apostoles Pedro y Pablo. Y nos lo dice el Misal: "Dedicóse este Papa a restaurar la disciplina eclesiastica, a extirpar la herejía protestante y a destruir el poderío de los turcos que amenazaban toda la civilización cristiana. Por divina inspiración conoció el feliz resultado de la batalla de Lepanto, debida al rezo del Santo Rosario. Murió en el año de 1572 y su Fiesta se celebra el 5 de Mayo".
Roguemos pues a San Pio V, que defienda a la Santa Iglesia, y que nos alcance del cielo la gracia de que la Misa Tridentina pueda volver a ser celebrada publicamente en los altares del orbe. Que Dios nos conceda por su interseción, una piedad y devoción ardientes para alcanzar la Santidad, como él lo hizo.

Oración: Oh Dios que para abatir a los enemigos de vuestra Iglesia y restaurar el culto Divino, os dignasteis elegir a San Pio V para Sumo Pontífice: haced que defendidos por su auxilio, nos dediquemos a vuestro Santo Servicio, para que superando las asechanzas de todos los enemigos, podamos alegrarnos en perpetua paz. Por Nuestro Señor Jesucristo, Amén,

La Exaltación de la Santa Cruz y la Devoción de los Mil Jesús

Es de piadosa tradición, por lo menos en mi patria, el rezo de los mil Jesús en el día de la Santísima Cruz. La Devoción consiste en hacer la señal de la cruz y hacer el acto de contrición. Se Utilizará un rosario común de cinco decenas y se le dará vuelta veinte veces para completar las mil invocaciones al Nombre de Jesús. En las cuantas grandes se dirá: "Santísima Cruz de Mayo, mi abogada tu has de ser, en la vida y en la muerte me haz de favorecer, si a la hora de la muerte el demonio me tentara le diré: satanás satanás! conmigo no contarás, ni parte de mi casa o mi alma tendrás, porque el día de la Santa Cruz dije Mil Veces Jesús, Amén".
Se repetira en las cuentas pequeñas el nombre Santísimo de "Jesús" y asi con las siguientes decenas, hasta darle 20 vueltas al rosario y completar los mil Jesús. También es tradición hacer una cruz de flores y hojas, para que sea bendecida y puesta en un lugar de honor en la casa, siendo de gran protección al fiel cristiano que la adore con devoción.

 

¡ Salve Oh Cruz: Mi única Esperanza!

Fiesta de San José Obrero e Inicio del Mes de Mayo

 

 

Hoy se une toda la Iglesia para celebrar la fiesta de San José Obrero. El origen de la devoción a San José bajo el título de "obrero" se debe a que el primero de mayo había sido hasta ese momento el día del trabajo o del trabajador; en este día los trabajadores y desempleados manifestaban su descontento y sus anhelos. Ha decidido Su Santidad Pio XII este mismo día en 1955, instituir la Fiesta de San José para que fuera venerado con el Título de Obrero, y así cristianizo la fiesta "del día del trabajo". Esto haría que los trabajadores del mundo entero encontraran en la figura de San José a un Padre, un Amigo, un Patron Justo y Prudente.

Pongamonos pues bajo el patrocinio y bendita custodia del Glorioso Patriarca San José, y celebremos como se debe esta fiesta, Confesandonos, Asistiendo a la Santa Misa y comulgando. Haciendo algún acto piadoso en honor del Custodio de la Santa Iglesia Romana y tambien de Nuestra Señora, pues hoy comienza el mes consagrado a su devoción. Aconsejo el rezo del Santo Rosario en honor de Nuestra Madre Bendita añadiendo al final de cada misterio la siguiente jaculatoria: "Amado San José, haz crecer en mí la fe, que en ella buscaré la esperanza y caridad, Amén". Y al final del Santo Rosario hacer alguna oración a San José, como la que le escribió León XIII.

Todo esto lo pagará el justísimo José a la hora de nuestra muerte.